En el México actual, las y los ciudadanos son libres de manifestar su opinión sin temor a la represión, sin importar que estas manifestaciones provengan de los partidos y organizaciones cuya agenda consiste en atacar a la Cuarta Transformación, señaló la dirigente Estatal del Partido Morena Brighite Granados.
La izquierda mexicana sufrió en carne viva los estragos de la represión durante los gobiernos del PRI y del PAN; jamás olvidaremos Atenco (2005) y Ayotzinapa (2014), o las numerosas otras ocasiones cuando el PRIAN usó la fuerza bruta para reprimir movimientos sociales. Por eso, la Cuarta Transformación garantiza, y garantizará en todo momento, el derecho a la libertad de expresión y de manifestación.
Sin embargo, es necesario hablarle con honestidad a la ciudadanía del estado de Chihuahua y aclarar que las manifestaciones del domingo 26 de febrero no son en defensa de la democracia: son en defensa de los privilegios de unos cuantos. Quieren volver a los tiempos donde ellos gozaban de salarios estratosféricos, nóminas infladas y fideicomisos opacos.