Nicaragua anunció la cancelación de la personalidad jurídica de los jesuitas y la confiscación de todos sus bienes en el país.
Nicaragua anunció el miércoles la cancelación de la personalidad jurídica de los jesuitas y la confiscación de todos sus bienes en el país, en la más reciente de una serie de medidas vistas por el liderazgo de la orden religiosa como un intento del Gobierno por “asfixiar” a la Iglesia católica en esa nación.
En un acuerdo publicado en la gaceta oficial, el Ministerio de Gobernación argumentó que la Compañía de Jesús no ha presentado sus estados financieros de los últimos tres años y su junta directiva está “vencida” desde marzo del 2020, lo que significa violaciones a la ley y falta de transparencia en sus operaciones.
Además, se instruye a la fiscalía general que traspase todos los bienes muebles e inmuebles de los jesuitas a nombre del Estado.
No estaba claro de inmediato las repercusiones que el acuerdo tendría sobre los jesuitas en Nicaragua. El gobierno del presidente Daniel Ortega no respondió a una solicitud de comentarios por parte de Reuters.
La Provincia Centroamericana de la Compañía de Jesús, que representa a los jesuitas en la región, dijo que no se le dio oportunidad a la orden en Nicaragua a la “legítima defensa” y que no existe una autoridad imparcial que frene lo que llamó “abusos de autoridad totalmente injustificados y arbitrarios”.