Tanto el secretario de Seguridad Pública, Gilberto Loya Chávez, como el coordinador de Protección Civil Estatal, indicaron que al momento no se tiene contemplado enviar empleados especiales para ayudar con la emergencia que se presenta en Acapulco, Guerrero.
¿QUÉ PASÓ EN ACAPULCO?
El estado mexicano de Guerrero, particularmente la ciudad de Acapulco, sufrió graves consecuencias tras el paso del poderoso huracán Otis, una tormenta de categoría 5 que azotó el icónico balneario turístico con vientos máximos sostenidos de 260 km/h y ráfagas de hasta 315 km/h. Se considera uno de los huracanes más intensos registrados en la historia del Pacífico mexicano.
Rosa Icela Rodríguez, secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana del país, confirmó durante la conferencia de prensa matutina de la presidencia que el desastre ha cobrado la vida de 27 personas, además de dejar a otras cuatro desaparecidas. La magnitud de la destrucción ha generado una situación de emergencia en la región, con diversas labores de rescate y reconstrucción en curso.
Las autoridades locales y nacionales están movilizándose para brindar asistencia y apoyo a los afectados por el huracán, coordinando esfuerzos de rescate y suministrando recursos esenciales a las comunidades afectadas. Se espera que los trabajos de recuperación y reconstrucción sean arduos y requieran la colaboración de múltiples sectores y entidades gubernamentales.