Característico por ser uno de los lugares mas mágicos de México, por su brillante pasado, producto de la plata que de sus minas se extraía, apenas se opaca por la belleza de su barranca homónima y todo lo que le rodea.
Imprescindible explorar a pie los principales ríos y arroyos o las antiguas veredas que comunicaban misiones, visitar la Mina La Bufa, una de las 300 que estuvieron más activas en la región. Practicar senderismo o bici de montaña en la barranca de Batopilas, río abajo, sus vistas son espléndidas.
Su gastronomía, uno de sus principales atractivos si quieres probar la auténtica machaca, ve al Restaurante Carolina (Plaza de la Constitución). También se recomiendan el chile con queso, las tortillas de harina y los dulces de leche con nuez. El sotol, la lechuguilla (licor de varios tipos de magueyes), el tesgüino o suguí (a base de maíz y considerada como sagrada para los tarahumaras), son las bebidas de la región, todas de interesante sabor.