Chihuahua, Chih.- En el estado de Chihuahua, la llegada del 6 de enero no solo marca el inicio del año nuevo, sino que también despierta la tradicional y esperada venta de la Rosca de Reyes. Este pan dulce, impregnado de simbolismo y sabor, ha conquistado los corazones y mesas de los chihuahuenses, convirtiéndose en un elemento esencial de la celebración de la Epifanía.








Las panaderías locales se preparan para satisfacer la demanda de esta deliciosa tradición, ofreciendo roscas que van desde las clásicas con frutas cristalizadas hasta las más innovadoras con rellenos de crema, chocolate o incluso frutos secos. Los aromas tentadores de la masa recién horneada invaden las calles, creando una atmósfera festiva que atrae a personas de todas las edades.
Este año, los establecimientos dedicados a la venta de roscas en Chihuahua han experimentado un aumento en la diversidad de opciones, con panaderos locales destacando sus habilidades y creatividad en la elaboración de estas delicias. Desde versiones más tradicionales hasta propuestas modernas, la variedad en la oferta asegura que cada familia pueda encontrar la rosca que se ajuste a sus preferencias y tradiciones.
Sin embargo, la tradición no está exenta de costos. Los precios de las roscas en Chihuahua oscilan entre los 180 y los 300 pesos, dependiendo del tamaño, los ingredientes y la reputación de la panadería. A pesar de ello, los chihuahuenses no dudan en invertir en esta tradición anual, considerándola como una inversión en momentos compartidos y la continuidad de costumbres que han perdurado a lo largo del tiempo.
En el espíritu de la festividad, las familias se reúnen en torno a la mesa para partir la rosca, un gesto simbólico que representa la búsqueda de la sorpresa, el compromiso con la tradición y la alegría de compartir con seres queridos.
En Chihuahua, la venta de la Rosca de Reyes no es solo una transacción comercial, sino un vínculo entre generaciones y un recordatorio de la riqueza cultural que se vive en cada rincón del estado. La Epifanía se celebra no solo con un pan dulce, sino con historias compartidas, risas y el cálido aroma de la rosca que llena los hogares de Chihuahua en esta temporada festiva.


