El puerto de Mazatlán se convirtió en el escenario de un espectáculo celestial inolvidable cuando miles de personas se congregaron para presenciar el eclipse solar total. Desde las 11:07 hasta las 11:11 horas, la franja de totalidad cautivó a todos los presentes, mientras el Sol se ocultaba gradualmente detrás de la Luna.
En el Parque Ciudades Hermanas, un escenario se erigió para recibir a los espectadores, quienes se agolparon en las aceras y camellones, todos ansiosos por presenciar este fenómeno astronómico único. Con la transmisión en vivo de la NASA proyectada en una pantalla gigante, la emoción creció a medida que se acercaba el momento de la totalidad.
Cuando finalmente comenzó la totalidad, un halo blanco rodeó al Sol, y la multitud estalló en gritos y aplausos. Aunque no hubo lágrimas, sí había un sentido de asombro y reverencia entre los presentes mientras observaban el espectáculo en el cielo.
Durante los cuatro minutos de totalidad, la noche llegó antes de tiempo, creando un ambiente único y casi místico. A medida que el eclipse llegaba a su fin y la luz del Sol comenzaba a reaparecer, las personas agradecieron y se dispersaron lentamente, aunque algunos se quedaron para disfrutar del eclipse en su totalidad.
Después de la totalidad, las gaviotas retomaron su vuelo con una precisión sorprendente, mientras el cielo adquiría un tono ocre y se iluminaba, creando una imagen digna de un amanecer. Sin duda, este eclipse solar total dejó una impresión duradera en todos los que tuvieron la suerte de presenciarlo en Mazatlán.
