La SRE demandará ante la Corte Internacional de Justicia que Ecuador repare el daño por la irrupción policiaca en la que detuvo al exvicepresidente Jorge Glas.
El gobierno de México solicitará al pleno de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) que apoye su demanda contra Ecuador ante la Corte Internacional de Justicia.
El recurso que se interpondrá ante dicha instancia buscará la reparación del daño por el allanamiento policial a la embajada mexicana en Quito, detalló ayer Alicia Bárcena, titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores. Dijo que también se buscará que el gobierno de Daniel Noboa otorgue el salvoconducto a Jorge Glas, exvicepresidente ecuatoriano actualmente preso, para que pueda ser llevado a México en calidad de asilado político.
Ayer, durante la conferencia matutina del presidente López Obrador se mostró un video del allanamiento a la embajada mexicana en Quito, que muestra las agresiones contra el jefe de la legación, Roberto Canseco, así como la detención de Glas, quien estaba refugiado en dichas instalaciones, pero quien terminó siendo cargado por policías.
Al respecto, Estados Unidos condenó “la violación de la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas, incluido el uso de la fuerza contra funcionarios de la embajada”, dijo el asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan.
Acusan violencia en la detención de Glas
El gobierno mexicano compartió un video del allanamiento a la embajada en Quito, donde se aprecia a la policía ecuatoriana forcejeando con personal diplomático
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, evidenció la violencia con la que la policía ecuatoriana ingresó a la embajada nacional en Ecuador y pidió a sus similares de Canadá y Estados Unidos reacciones más enérgicas sobre los actos del gobierno de Daniel Noboa.
El jefe del ejecutivo federal reprochó a Joe Biden, presidente de los Estados Unidos, y a Justin Trudeau, primer ministro de Canadá no hubo condenar personal y categóricamente el asalto a la embajada mexicana por parte de militares y policías de Ecuador, a pesar de que la conducta criminal puso en riesgo la vida y la integridad del personal diplomático de nuestro país, así como la del huésped y asilado de México en ese recinto, Jorge Glas, exvicepresidente de Ecuador.
