Un estudio realizado en 2022 reveló que el número de estadounidenses que fuman cannabis a diario o casi a diario ha superado al de los que beben alcohol con la misma frecuencia.
La investigación, publicada en la revista Addiction, se basó en datos recopilados durante cuatro décadas por la Encuesta Nacional sobre Uso de Drogas y Salud. En 2022, la encuesta registró aproximadamente 17.7 millones de consumidores diarios de cannabis, en comparación con 14.7 millones de bebedores diarios.
Aunque el alcohol sigue siendo consumido de manera más amplia, 2022 marcó la primera vez que el consumo intensivo de marihuana superó el consumo diario y casi diario de alcohol, según el autor del estudio, Jonathan Caulkins, investigador de políticas de cannabis en la Universidad Carnegie Mellon.
En 1992, el consumo diario de marihuana alcanzó su punto más bajo, con menos de un millón de personas reportando el uso casi diario de la sustancia desde que comenzó el estudio en 1979. Desde entonces hasta 2022, la tasa per cápita de consumo diario o casi diario de marihuana se multiplicó por 15. Caulkins señaló que el aumento podría estar influenciado por una mayor disposición de las personas a informar sobre el consumo de marihuana a medida que crece la aceptación pública.
La mayoría de los estados permiten el uso medicinal o recreativo de la marihuana, aunque sigue siendo ilegal a nivel federal. En noviembre, los votantes de Florida decidirán sobre una enmienda constitucional para permitir el cannabis recreativo.
En respuesta a estos cambios, el gobierno estadounidense está tomando medidas para reclasificar la marihuana como una droga menos peligrosa. A principios de este mes, el Departamento de Justicia inició el proceso para reclasificar el cannabis de una sustancia controlada de la Lista I, al mismo nivel que la heroína, a una sustancia de la Lista III.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, comentó sobre el tema: “Demasiadas vidas han sido trastornadas debido a nuestro enfoque fallido hacia la marihuana”.
