Al menos ocho personas perdieron la vida y seis resultaron heridas tras el desplome de un puente en una localidad en la región amazónica de Beni, en el noreste de Bolivia, según informaron autoridades locales.
El trágico suceso ocurrió el miércoles en la noche en el municipio de Santa Ana del Yacuma, cuando el puente Rapulo, de unos 130 metros de longitud, colapsó mientras pasaba por él un camión, reportó la alcaldesa de la localidad, Rocío Roca, en una entrevista con el canal estatal Bolivia TV.
“Han caído cuatro personas que han quedado heridas y lamentablemente había dos familias de comunarios (indígenas) de la comunidad Turindi que se encontraban asentadas debajo del puente”, lamentó Roca, quien aseguró que se están realizando todas las acciones para rescatar los cuerpos.
Los ocho fallecidos son indígenas tsimanes que solían viajar constantemente a Santa Ana para vender productos como plátanos o yucas, explicó el secretario general de la alcaldía, Rafael Menacho. Seis personas resultaron heridas, cuatro de ellas que viajaban en el camión y dos indígenas que lograron salvar sus vidas.
La caída del puente dejó incomunicado al municipio por vía terrestre, por lo que se buscará facilitar el tránsito por el lugar mediante embarcaciones. El Concejo Municipal de Santa Ana aprobó una declaración de “desastre municipal” para facilitar la llegada de ayuda departamental y nacional.
El puente fue construido en 2011 durante la gestión del ex presidente Evo Morales mediante el programa ‘Bolivia cambia, Evo cumple’, y fue financiado mayormente con donaciones del entonces gobierno venezolano. El ministro de Obras Públicas, Edgar Montaño, indicó que el costo fue superior a los 10.3 millones de bolivianos (unos 1,4 millones de dólares).
El viceministro de Defensa Civil, Juan Carlos Calvimontes, explicó que se envió a marinos de la Base Naval de Santa Ana para apoyar en el rescate de los cuerpos mientras se coordinan acciones con la policía boliviana y otras entidades para asistir en la emergencia.
