La Directora de la CONADE tendría que ir a la Basílica de Guadalupe; porque de manera soñadora busca superar las ganadas en México 68
Ana Gabriela Guevara, la actual Directora de la Comisión Nacional del Deporte (CONADE), lleva mucho tiempo en el ojo del huracán, atrás, en la mente de muchos de sus grandes admiradores del pasado, han quedado aquella jornadas mágicas en donde hizo soñar despierto al pueblo mexicano dominando la prueba de los 400 metros planos.
Sin embargo, para la nacida hace 47 años en Nogales, Sonora, la idea es que, en los próximo Juegos Olímpicos de París 2024 se haga historia, así como ella lo hizo con su velocidad en aquella mágica velada en la ‘Ciudad Luz’ cuando el 27 de agosto de 2003 con un tiempo de 48.89 segundos (marca histórica Stade de France en Saint-Denis se coronó como campeona mundial en los mencionados 400 metros planos.
El significado de París para Ana Gabriela Guevara
“París es el reto, yo creo que es la culminación de este trabajo y para mí París tiene mucho significado, ahí fui campeona del mundo”, dijo Ana Gabriela Guevara en entre vista exclusiva con Café MILENIO-La Afición. “Por primera vez bajé de los 50 segundos y también puedo presumir el récord del estadio. Así que para mí París tiene un gran sentimiento y en esta ocasión guarda un doble sentir, porque ahora me toca acompañar al equipo mexicano después del trabajo realizado y ver que van a realizar su sueño, así que París es todo un reto”.
Así como en aquella ocasión hizo historia para nuestro país, de acuerdo con sus palabras la ambición en reescribir los libros de récords en lo que se refiere a lo que se haga como delegación mexicana en la capital de Francia y batir la marca de medallas conseguidas en una edición de Juegos Olímpicos.
La meta de Ana Gabriela Guevara en París 2024
“La apuesta es ambiciosa”, dijo la ex velocista con mucha seguridad. “La mira está puesta en rebasar el histórico que son nueve. Me toca hacer que la mesa esté puesta para que ellos vayan y compitan en las mejores condiciones y que tengan esta garantía. Y ellos harán su labor, pero ponerle nombre y apellido a las medallas les genera una carga extra a los atletas y sé que eso no es lo correcto. Yo le diría a la gente que tenga la confianza de que hemos hecho lo mejor para que nuestros deportistas lleguen a competir de la mejor manera a París”.
