El FBI identificó a Thomas Matthew Crooks, de 20 años y residente en Bethel Park, Pensilvania, como el responsable del intento de asesinato de Donald Trump. Crooks, abatido por el Servicio Secreto, disparó hacia un escenario donde Trump hablaba en un mitin en Butler. Graduado en 2022, Crooks tenía antecedentes académicos destacados pero falló al intentar unirse al equipo de tiro en su preparatoria.
Trump, herido en la oreja derecha, llamó a la unidad y resiliencia en su red Truth Social. El Servicio Secreto investiga cómo Crooks pudo acercarse con un fusil tipo AR. El presidente Joe Biden ordenó una investigación independiente y pidió revisar la seguridad para la Convención Nacional Republicana en Milwaukee.
Francisco Santana, internacionalista, opina que el ataque podría fortalecer la imagen de Trump como un candidato “invencible” ante sus seguidores, beneficiando su campaña presidencial.
Seguidores de Trump organizaron una vigilia en Milwaukee, mostrando mensajes de apoyo y orando por su pronta recuperación. Alexandra Schwatge y John Puchner, entre otros, expresaron su solidaridad y deseo de unidad frente a la violencia.
El bombero retirado Corey Comperatore murió en el ataque al proteger a su familia. El gobernador de Pensilvania, Josh Shapiro, confirmó su identidad y lo llamó “héroe”.
El intento de asesinato contra Trump ha generado un fuerte llamado a la unidad y ha provocado una revisión de las medidas de seguridad para futuros eventos políticos importantes.
