El presidente de Chile, Gabriel Boric, reafirmó su postura de no reconocer el proclamado triunfo de Nicolás Maduro en Venezuela. Tras reunirse con el embajador chileno en Venezuela, Jaime Gazmuri, recientemente expulsado por el gobierno venezolano, Boric expresó: “No validaremos ningún resultado que no esté verificado por organismos internacionales independientes”. Además, hizo un llamado a respetar los derechos humanos de los manifestantes y a terminar con las detenciones arbitrarias y la violencia.
El canciller chileno, Alberto van Klaveren, también comentó sobre la situación electoral, mencionando la posibilidad de que Edmundo González haya ganado, pero señaló la falta de verificación independiente del proceso. Venezuela también ha ordenado el retiro de sus embajadores en varios países latinoamericanos y ha expulsado sus misiones diplomáticas.
Tras el cierre de la embajada venezolana en Santiago, numerosos ciudadanos venezolanos han buscado información sobre su situación migratoria. Boric fue uno de los primeros líderes en exigir transparencia en el recuento de votos y cuestionar los resultados del Consejo Nacional Electoral (CNE) venezolano.
El CNE ratificó el viernes que Maduro fue reelegido con el 51.95% de los votos frente al 43.18% de González Urrutia. La oposición ha denunciado irregularidades y exigido la publicación de todas las actas, respaldada por la mayoría de los países de la región, la ONU y el Centro Carter.
