Antonio Pérez Garibay, padre del piloto mexicano de la escudería Red Bull Checo, sufrió un preinfarto durante el domingo 15 de septiembre y actualmente se encuentra en terapia intensiva, aunque señala que ya se encuentra mejor.
El también político mexicano de 65 años informó que ya se encuentra mejor de salud, pero sigue en observación para que los médicos monitoreen el funcionamiento de su corazón, según pudo saber La Afición.

Además, Pérez Garibay señaló que su problema de salud pudo haberse dado tras la impresión del choque en el Gran Premio de Azerbaiyán que protagonizó su hijo Checo junto a Carlos Sainz, tras el que ambos tuvieron que abandonar la carrera y el mexicano perdió la oportunidad de subir al podio.
“Todo pasó después de accidente. La impresión del accidente puede que me lo haya provocado. Ya están checando el corazón y ver porqué el desmayo”, compartió Pérez Garibay a La Afición.
Cabe mencionar que, hasta el momento se desconoce si en realidad lo ocurrido en la carrera fue lo que originó sus problemas en el corazón.
Tanto Checo como Pérez Garibay se han mantenido sin manifestarse por lo ocurrido.