Chihuahua, Chih.- El gobernador morenista Rubén Rocha Moya enfrenta una situación crítica al llegar a la mitad de su sexenio al ser acusado de tener vínculos con el Cártel de Sinaloa.
Luego de varias semanas con Sinaloa sumido en la violencia, el mandatario está siendo investigado por los órganos de inteligencia del gobierno federal ante la sospecha de haber favorecido al grupo criminal de Los Chapitos, en detrimento de la facción del Mayo Zambada.
Según información publicada por el medio proceso, el Centro Nacional de Inteligencia (CNI) y los servicios de inteligencia militar están “dando seguimiento personal y manteniendo vigilancia” sobre Rocha Moya, bajo instrucciones del entonces presidente Andrés Manuel López Obrador y con el respaldo de la presidenta Claudia Sheinbaum.