El gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, se encuentra bajo investigación por presuntos vínculos con prácticas corruptas, lo que ha generado tensión en su relación con la administración de la Cuarta Transformación.
A pesar de ser un aliado cercano de Adán Augusto López, las autoridades han comenzado a indagar en denuncias que podrían afectar su posición.
La situación pone en duda el apoyo que la 4T ha mostrado hacia Rocha Moya hasta ahora.