Chihuahua, Chih.- Un ataque aéreo israelí en Sarafand, Líbano, dejó a Ali Jalifa, un niño de dos años, como el único sobreviviente de su familia, tras pasar 14 horas bajo escombros.
La incursión, parte del conflicto entre Israel y Hezbolá, resultó en la muerte de los padres, hermana y abuelas de Ali. Con graves lesiones, incluyendo la amputación de una mano, el niño permanece en coma inducido.
Otros familiares también resultaron gravemente heridos, y el trauma emocional es profundo. Este conflicto ha provocado miles de muertes en la región desde septiembre.


