Alfonso Álvarez, alias el Italo-Mexicano, se dedica a atraer víctimas en Bumble y luego estafarlas con sumas considerables de dinero.
Alfonso Álvarez, conocido como el Italo-Mexicano, emplea seudónimos como Baruk, Ezrra o Johan en Bumble para atraer a sus víctimas y, en realidad, estafarlas con grandes sumas de dinero.
Hasta ahora, Alfonso ha estafado a más de 11 mujeres, haciéndoles creer que su empresa italiana no está operando correctamente en México.
Las estafas oscilan entre los 175 mil pesos, y las víctimas afirman que su modus operandi consiste en culparlas, haciéndolas sentir que, por su culpa, él terminará regresando a Italia.
Una de las víctimas, que prefirió mantener su anonimato, tuvo un hijo con él. Inicialmente, él le aseguró que se haría responsable, pero luego desapareció. Más tarde, la mujer descubrió en redes sociales que la razón de su desaparición era que él ya estaba casado.
Para desaparecer, Alfonso Álvarez solía inventar siempre el mismo relato: un secuestro.
Según varios testimonios, la estafa también involucra a su esposa Brenda, quien contacta a las mujeres afirmando ser víctima de violencia, a su cuñado, que se hace pasar por su amigo Ali de origen árabe, y a sus hermanas, quienes han amenazado a las víctimas para que no hablen.
Paty, otra de las víctimas, fue la única que logró localizarlo y recuperar todo su dinero, gracias a una bicicleta que le robó, cuyo manillar se asomó por un portón en un domicilio en Valle Dorado, Estado de México.
Todas las víctimas coinciden en un punto: “El Italo-Mexicano”, quien en realidad es originario de la Ciudad de México, tiene una estrategia perfectamente orquestada en colaboración con su familia para seguir estafando.
