El gobierno de la Ciudad de México ha generado controversia al confirmar que el sonidero Polymarchs, fundado por Apolinar Silva en 1973, será el encargado del concierto de fin de año en el Ángel de la Independencia. Este evento tendrá un costo de más de 12 millones de pesos, una cifra significativamente mayor a la que se ha pagado en años anteriores a artistas de renombre internacional como Los Ángeles Azules o Rubén Blades.
Polymarchs, un fenómeno de la cultura popular sonidera, es propiedad de Apolinar Silva, padre de Paulina Silva, actual coordinadora de Comunicación Social de la presidenta Claudia Sheinbaum, lo que ha desatado cuestionamientos sobre un posible conflicto de interés. Paulina Silva, conocida como una de las colaboradoras más cercanas de Sheinbaum, finalizó en 2023 una maestría en Imagen Pública, dedicando su tesis a su padre como ejemplo de perseverancia.
La cifra que cobrará Polymarchs, alrededor de 12 millones de pesos, supera por mucho los honorarios de grupos como Los Ángeles Azules, que han cobrado entre 2 y 3 millones de pesos por presentaciones similares. Con ese presupuesto, sería posible contratar a este grupo en al menos cuatro ocasiones.
En contraste con este 2024, los eventos de fin de año en el Ángel de la Independencia han contado en años anteriores con artistas de alto perfil. En 2023, Rubén Blades encabezó el concierto; en 2022 y 2019, Los Ángeles Azules compartieron escenario con La Sonora Dinamita. Los años 2020 y 2021 no hubo eventos debido a la pandemia.
El tema también pone en la mesa la reciente declaratoria de la cultura sonidera como patrimonio cultural inmaterial de la Ciudad de México, firmada en octubre de 2023 por las autoridades locales. Aunque la designación busca reconocer la relevancia de este movimiento, críticos cuestionan si el presupuesto asignado a Polymarchs es justificado en un contexto de austeridad.
Con información de Latinus, hasta el momento, el gobierno de la Ciudad de México no ha emitido declaraciones para aclarar los criterios de contratación, mientras la polémica sigue generando reacciones en redes sociales y círculos políticos.