El gobierno de Estados Unidos buscará imponer penas de muerte o cadena perpetua a seis de los 29 presuntos integrantes de grupos del crimen organizado en México que fueron entregados el jueves 25 de febrero por el gobierno de Claudia Sheinbaum, entre ellos Rafael Caro Quintero y Vicente Carrillo Fuentes, alias “El Viceroy”.
En un comunicado, la titular del Departamento de Justicia de Estados Unidos, Pamela Bondi, confirmó la recepción de los 29 líderes criminales y adelantó que se solicitarán las penas máximas para todos ellos; en el caso de las otras 23 personas, esto podría traducirse en prisión de por vida.
Además de Caro Quintero y Carrillo Fuentes, los otros cuatro que podrían enfrentar la pena capital son José Rodolfo Villarreal Hernández, Luis Geraldo Méndez Estevane, Aliso Martín Sotelo y Andrés Clark.
Esta acción se enmarca en la designación que hizo la administración del presidente Donald Trump de los cárteles mexicanos como organizaciones terroristas. Los fiscales evaluarán si los cargos adicionales de terrorismo y violencia son apropiados, y si la pena capital está disponible según la política establecida en las órdenes ejecutivas correspondientes.
En el comunicado, se destaca que Rafael Caro Quintero es responsabilizado directamente de la tortura y asesinato del ex agente especial de la DEA Enrique “Kiki” Camarena. El administrador interino de la DEA, Derek S. Maltz, declaró: “Hoy podemos decir con orgullo que ha llegado a los Estados Unidos, donde se hará justicia”.
*Información obtenida de Milenio.*
