El empresario Elon Musk ha generado polémica tras rechazar la reducción de la jornada laboral y defender la necesidad de largas horas de trabajo para garantizar la productividad. En un reciente mensaje en redes sociales, Musk enfatizó que quienes desean sobresalir en sus carreras deben estar dispuestos a trabajar jornadas extensas, incluso superiores a las 80 horas semanales.
Sus declaraciones han desatado críticas por parte de sectores laborales y expertos en derechos de los trabajadores, quienes consideran que este tipo de exigencias afectan la calidad de vida y el bienestar de los empleados. En contraste, Musk argumentó que la dedicación extrema es clave en la innovación y el éxito empresarial.
Esta postura no es nueva en la filosofía de trabajo del magnate, quien en el pasado ha impuesto políticas laborales estrictas en sus empresas, como Tesla y SpaceX, fomentando jornadas prolongadas y minimizando el teletrabajo.
El debate sobre la reducción de la jornada laboral ha tomado relevancia en varios países, donde algunos gobiernos han comenzado a implementar semanas laborales más cortas con el objetivo de mejorar la productividad y el equilibrio entre la vida personal y profesional. Sin embargo, la visión de Musk se mantiene en el extremo opuesto, privilegiando la cultura del esfuerzo intensivo sobre las nuevas tendencias en la organización del trabajo.
