El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, expresó su apoyo a Elon Musk tras el boicot que ha impactado a Tesla, provocando una caída del 15.4% en sus acciones y acumulando una pérdida del 45% en lo que va del año. A través de su red social, Trump calificó la situación como un ataque injustificado y anunció que comprará un vehículo de la marca para demostrar su respaldo al empresario, a quien llamó “un verdadero gran estadounidense”.
El boicot contra Tesla se debe a la participación de Musk en el gobierno de Trump, donde lidera el Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE). Esta relación ha generado rechazo en diversos sectores, que acusan al empresario de influir políticamente en favor de la administración republicana. En respuesta, grupos de manifestantes han organizado protestas frente a concesionarios de Tesla, además de reportarse actos de vandalismo contra instalaciones de la empresa.
Trump criticó estos movimientos, asegurando que representan un acto de “terrorismo doméstico” y acusando a la “izquierda radical” de intentar destruir una de las compañías más importantes del sector automotriz. Sin embargo, analistas advierten que la asociación con Trump podría afectar la imagen de Tesla, alejando a clientes y potenciales inversionistas que no comparten la ideología del mandatario.
Por su parte, Elon Musk agradeció el respaldo del presidente y reiteró su compromiso con la misión de Tesla de acelerar la transición hacia la energía sostenible. A pesar de la crisis, el empresario mantiene su postura de no desvincularse del gobierno, lo que podría generar un impacto prolongado en la estabilidad financiera y la percepción pública de la compañía.