Chihuahua, Chih.-Mientras la presidenta Claudia Sheinbaum siga apelando a los Estados Unidos y sus decisiones comerciales, China ha mostrado su distancia cancelando o retrasando inversiones y mostrándose reacia a seguir con las negociaciones con nuestro país. Un ejemplo de ello fue el retraso de la planta de BYD en México.
Con el gobierno federal tratando de seguir manteniendo a EE. UU. como principal aliado comercial, el gigante asiático ha puesto sus ojos en Perú. Presuntamente son los fabricantes de suministros médicos los que buscan expandirse, luego de que el país suramericano se viera más “receptivo” con las empresas chinas.
Según declaraciones de la Secretaría de Desarrollo Económico de Jalisco, ellos no están buscando inversiones chinas, sino que buscan una “agenda alineada” con EE. UU.