La muerte de los fotógrafos Berenice Giles y Miguel Ángel Rojas en el festival AXE Ceremonia ha generado una fuerte conmoción en la industria musical y el gremio periodístico. El colapso de una estructura metálica en el Parque Bicentenario el pasado 5 de abril ha puesto en evidencia la falta de protocolos de seguridad en eventos masivos, lo que ha desatado un debate sobre la precariedad laboral de los comunicadores y la responsabilidad de los organizadores.
El accidente, calificado como una negligencia que pudo haberse evitado con una inspección adecuada de Protección Civil, ha llevado a miles de personas a exigir justicia y sanciones para los responsables. La indignación ha crecido, y algunos rumores en redes sociales sugieren que todos los festivales musicales en la Ciudad de México podrían ser cancelados por lo que resta de 2025. Aunque no hay confirmación oficial, la especulación ha generado incertidumbre sobre eventos como Tecate Emblema, Arre, Corona Capital, Festival Hipnosis y Flow Fest.
En respuesta a la tragedia, Grupo Indie Rocks! anunció la suspensión temporal de sus actividades y la reprogramación del Pitchfork Music Festival CDMX como muestra de respeto y solidaridad con las víctimas y sus familias. La decisión refleja la necesidad de revisar las condiciones de seguridad en festivales y garantizar espacios seguros para asistentes y trabajadores.
Más allá de los rumores, la tragedia en AXE Ceremonia marca un punto de inflexión en la organización de eventos masivos en México. La exigencia de medidas de seguridad más estrictas y la rendición de cuentas por parte de los organizadores son ahora temas prioritarios en la conversación pública. ¿Crees que esta situación cambiará la forma en que se organizan los festivales en el país?