Dos cabecillas de la pandilla Barrio 18 aseguraron al diario El Faro que el presidente de El Salvador, Nayib Bukele, habría negociado con las pandillas su ascenso político, incluyendo su llegada a la presidencia en 2019. En entrevistas difundidas este viernes, los pandilleros relataron que el acuerdo incluía beneficios y reducción de operativos a cambio de votos.
Carlos Cartagena, alias “Charli”, líder de la facción Revolucionarios de Barrio 18, afirmó que Bukele “debe el 75 u 80 por ciento de su triunfo” al apoyo de las pandillas. Otro pandillero, identificado como “Liro Man”, sostuvo que se usó presión y amenazas en comunidades controladas por su grupo para influir en el voto a favor del ahora presidente.
Los señalados como enlaces del gobierno con las pandillas fueron Carlos Marroquín, director de “Tejido Social”, y Osiris Luna, director de cárceles y viceministro de Justicia, ambos sancionados por Estados Unidos por sus presuntos vínculos con estas organizaciones criminales.
Bukele respondió en redes sociales sin mencionar directamente a El Faro, acusando a medios y ONG de “perder su negocio” con la reducción de homicidios en el país. Desde 2022, su régimen de excepción ha dejado más de 86 mil detenidos, aunque ha liberado a 8 mil por falta de pruebas. La denuncia vuelve a poner en duda la legitimidad del combate frontal del mandatario contra las pandillas.
