El Aeropuerto Internacional de Saná, principal terminal aérea de Yemen, fue reducido a escombros tras un ataque aéreo lanzado por Israel como represalia al reciente impacto de un misil hutí cerca del aeropuerto Ben Gurión en Tel Aviv. Las autoridades hutíes reportaron tres muertos y más de 30 heridos tras el bombardeo que destruyó pistas, hangares y salas de pasajeros.
Las imágenes del ataque muestran un avión en llamas y la infraestructura envuelta en humo denso, lo que provocó alarma internacional. Según el ejército israelí, el aeropuerto era utilizado para lanzar misiles y drones, por lo que se trató de una acción preventiva. Aunque se emitió una alerta para evacuar la zona, los daños fueron significativos.
La ofensiva ocurre en medio de una creciente tensión en Medio Oriente, tras varios ataques hutíes en territorio israelí. Pese a que Estados Unidos anunció el fin de su ofensiva contra los hutíes tras una mediación de Omán, las acciones de Israel continúan. Analistas consideran que este ataque podría marcar una nueva fase de confrontación directa entre Yemen e Israel.
