Washington, D.C.- La Casa Blanca analiza suspender el habeas corpus, uno de los principios fundamentales del sistema legal estadounidense, como parte de una estrategia para intensificar sus políticas antimigrantes. Así lo confirmó Stephen Miller, uno de los principales asesores del presidente Donald Trump, quien sostuvo que esta suspensión es legal en “tiempos de invasión”.
El gobierno republicano ha utilizado este argumento para justificar la militarización fronteriza y la deportación masiva de migrantes, principalmente venezolanos, incluso hacia centros de detención en el extranjero como la megacárcel CECOT en El Salvador. Miller advirtió que la decisión dependerá de la postura que adopten los tribunales: “Todo depende de si las cortes hacen lo correcto o no”, afirmó.
Diversas organizaciones civiles han presentado recursos legales en contra de estas acciones, recurriendo precisamente al habeas corpus como defensa para frenar deportaciones y detenciones arbitrarias. Algunas cortes han fallado en favor de los activistas y migrantes, lo que ha desatado una ofensiva del Ejecutivo contra el Poder Judicial. La Casa Blanca incluso ha desobedecido órdenes judiciales, como la que exigía repatriar a Kilmar Ábrego García, expulsado ilegalmente pese a contar con estatus migratorio legal.
La suspensión del habeas corpus ha ocurrido solo cuatro veces en la historia de EE.UU., durante contextos de guerra o amenaza directa. Esta nueva posibilidad despierta alarma entre defensores de derechos humanos, que advierten sobre un “precedente autoritario sin justificación legal ni humanitaria”.