H. Cd. de Chihuahua.– León XIV, el primer Papa nacido en Estados Unidos, inició oficialmente su Pontificado con un fuerte mensaje de unidad y comunión durante la misa celebrada en la Plaza de San Pedro, ante miles de fieles, jefes de Estado y líderes religiosos.
El nuevo líder de la Iglesia Católica, un misionero agustino de 69 años, afirmó que su misión será ser un servidor a través del amor y la unidad, y subrayó la importancia de una Iglesia que actúe como símbolo de reconciliación para el mundo.
“Nuestro primer gran deseo debe ser una Iglesia unida, signo de comunión, fermento de un mundo reconciliado”, expresó durante su homilía.
Visiblemente conmovido, León XIV recibió los símbolos del Papado: la estola de lana y el anillo del pescador, con lo que asumió oficialmente el “ministerio petrino del Obispo de Roma”, en una ceremonia que evitó referencias a coronaciones pasadas.
En su mensaje, recordó con afecto al Papa Francisco y reconoció el peso de la responsabilidad:
“Fui elegido sin tener ningún mérito… vengo como un hermano que quiere hacerse siervo de su fe y de su alegría”, dijo.
El Papa reiteró que los pilares de su diplomacia serán la paz, la justicia y la verdad. En ese contexto, recibió a representantes de gobiernos de todo el mundo, incluida la secretaria de Gobernación de México, Rosa Icela Rodríguez, quien le entregó una invitación formal para visitar el país.
“Desde la Basílica de San Pedro, el Papa León XIV envió saludos a la presidenta Claudia Sheinbaum y al pueblo de México”, publicó la funcionaria en redes sociales.
Rodríguez destacó la cercanía del Pontífice con los migrantes y pueblos indígenas, lo que genera expectativas positivas en América Latina.