H. Cd, de Chihuahua.- Durante la demolición de una casa en el barrio de Coghlan, Buenos Aires —donde vivió Gustavo Cerati entre 2001 y 2003— obreros encontraron restos óseos humanos, lo que activó una investigación judicial.
La propiedad, ubicada en avenida Congreso 3700, había sido vendida para la construcción de un edificio. Junto con los restos también hallaron relojes y prendas antiguas, lo que sugiere que podrían tener más de un siglo de antigüedad.
Según testigos, antes de ser vivienda fue un asilo geriátrico del siglo XIX. La fiscalía analiza si los restos pertenecen a antiguos residentes. Por el momento, no hay vínculos con la época en la que Cerati habitó la casa.
El hallazgo ha causado conmoción y especulaciones en redes sociales, pero las autoridades piden cautela mientras se realizan los peritajes.