Cientos de ciudadanos estadounidenses han abandonado Irán en medio de la creciente tensión en la región tras el recrudecimiento del conflicto con Israel, mientras otros enfrentan serias dificultades para salir del país, según revela un informe interno del Departamento de Estado.
La situación se ha tornado cada vez más delicada debido a que el expresidente Donald Trump, quien actualmente busca regresar a la Casa Blanca, evalúa una posible intervención militar contra Irán, lo que ha elevado el nivel de alerta entre las agencias estadounidenses.
El informe, fechado el viernes, advierte que los estadounidenses que aún permanecen en Irán se encuentran en situación de riesgo, particularmente ante la ausencia de presencia diplomática directa de Estados Unidos en territorio iraní. A diferencia de Israel, donde el gobierno estadounidense ha iniciado gestiones para establecer corredores de salida y facilitar vuelos de evacuación, en Irán no existen mecanismos similares debido a la ruptura de relaciones bilaterales.
“No prevemos ofrecer asistencia directa para la salida de Irán por parte del Gobierno estadounidense”, afirmó Tammy Bruce, portavoz del Departamento de Estado, durante una rueda de prensa ofrecida el mismo día.
De acuerdo con el documento, algunos ciudadanos estadounidenses han enfrentado hostilidad por parte de las autoridades iraníes. Se han registrado reportes de controles de seguridad, interrogatorios arbitrarios, hostigamiento e incluso la detención de al menos dos personas que intentaban abandonar el país. También se han documentado retrasos en los cruces fronterizos y obstáculos logísticos significativos.
Una fuente familiarizada con la situación, quien ha intentado sacar del país a un familiar con nacionalidad estadounidense, expresó frustración ante la respuesta del Departamento de Estado, al considerar que la dependencia ha delegado demasiado en embajadas estadounidenses en países vecinos, las cuales estarían rebasadas por la emergencia. La misma persona urgió a que el gobierno de EE.UU. intensifique la presión diplomática sobre los países fronterizos para que permitan el ingreso de ciudadanos estadounidenses y propuso enviar funcionarios consulares más cerca de la frontera iraní.
Mientras tanto, Bruce informó que más de 25 mil personas han solicitado información relacionada con la crisis en Israel, Cisjordania e Irán. En respuesta, el Departamento de Estado habilitó un “formulario de admisión de crisis” para que ciudadanos estadounidenses puedan registrar su ubicación e interés en abandonar los países involucrados en el conflicto.
“Los estadounidenses que buscan salir deben aprovechar las vías existentes para hacerlo”, añadió Bruce, quien también indicó que la mayoría de los contactos recibidos buscan información general, aunque algunos sí están relacionados con solicitudes de evacuación.
En paralelo, el embajador de Estados Unidos en Israel, Mike Huckabee, señaló que se está trabajando activamente en la coordinación de vuelos comerciales, militares, chárter e incluso cruceros para facilitar la evacuación de los aproximadamente 200 mil estadounidenses que se calcula se encuentran en ese país.
La tensión internacional se agravó esta semana luego de que Trump anunciara un plazo de dos semanas para evaluar una posible acción militar contra Irán. La declaración desató un esfuerzo urgente por parte de actores internacionales para reactivar las negociaciones diplomáticas, que se habían estancado tras el inicio de la campaña de bombardeos israelíes la semana pasada.
