Una mujer de origen rarámuri fue asegurada por elementos de la Policía Municipal en la ciudad de Chihuahua, luego de que su hija, una bebé de apenas dos meses de edad, ingresara de emergencia al Hospital Morelos del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) con severas afectaciones a su salud, presuntamente provocadas por el suministro excesivo de medicamentos.
De acuerdo con los primeros reportes, la madre habría colocado medicamentos en el biberón de la menor con la intención de tranquilizarla, sin tener conocimiento de la dosis adecuada ni de los posibles efectos adversos. Esta acción derivó en un cuadro clínico que puso en riesgo la vida de la bebé, quien, según fuentes médicas, estuvo cerca de sufrir un paro respiratorio.
Personal del nosocomio notificó a las autoridades, por lo que elementos de la Policía Municipal acudieron al lugar y aseguraron a la mujer para ponerla a disposición del Ministerio Público. El caso fue turnado a la Fiscalía General del Estado, que abrió una carpeta de investigación para determinar si hubo negligencia, imprudencia o alguna otra conducta que pudiera configurar un delito.
Aunque inicialmente se manejó la posibilidad de una acusación por tentativa de homicidio, fuentes cercanas a la investigación señalaron que, con base en las entrevistas preliminares y el contexto cultural de la madre, no existen hasta el momento elementos que confirmen una intención deliberada de privar de la vida a su hija.
La mujer pertenece a una comunidad rarámuri asentada en la capital del estado, y según los primeros indicios, actuó desde el desconocimiento, sin una comprensión clara de los riesgos asociados al uso de medicamentos en infantes.
La bebé continúa recibiendo atención médica especializada y se reporta fuera de peligro. En tanto, personal del área de Trabajo Social y del DIF Estatal ya interviene en el caso para valorar las condiciones familiares, sociales y culturales en las que ocurrió este incidente.