H. Cd. de Juárez.- Lo que comenzó como una inspección por un cadáver ejecutado terminó por revelar una de las escenas más escalofriantes en la historia reciente de Chihuahua: la Fiscalía General del Estado confirmó el hallazgo de 383 cuerpos apilados y sin procesar dentro de un crematorio clandestino en la colonia Granjas Polo Gamboa.
El fiscal César Jáuregui calificó el caso como una “situación sumamente grave desde el punto de vista sanitario, legal y humano”. Los restos provenían de diversas funerarias privadas y permanecían almacenados en estado de descomposición. Algunas de las empresas que presuntamente enviaban cuerpos al sitio son Luz Divina, Amor Eterno y Protecto Deco, aunque aún no hay cargos formales contra ellas.
La gobernadora Maru Campos aseguró que este caso “no involucra crimen organizado”, pero sí evidencia un entramado que calificó como “de terror”, y que el gobierno estatal ya está enfrentando “tomando el toro por los cuernos”. La zona permanece bajo resguardo mientras continúan las diligencias forenses.