Durante el 4 de julio, en la Ciudad de México, colectivos se reunieron en el Foro Lindbergh del Parque México para realizar una marcha contra la gentrificación. el movimiento buscó abordar la problemática sobre el desplazamiento de comunidades en la zona. Ante ello, la militancia del Partido Acción Nacional (PAN) aprovechó la conmoción para criticar al movimiento de Morena por vandalismo.
El vocero del Grupo Parlamentario del PAN, Federico Döring Casar, expresó su posición en torno a los hechos de violencia registrados durante la manifestación. en esta, algunos establecimientos y restaurantes resultaron afectados durante el recorrido de los protestantes por la Condesa y Roma.
Frente a los incidentes de violencia y hostigamiento contra el turismo, la militancia blanquiazul acusó a simpatizantes de Morena como responsables de los ataques. esto originó un debate sobre el sentido real del movimiento contra la gentrificación.
Desde San Lázaro, Döring Casar calificó los percances de agresión como una acción estratégica que impulsaron simpatizantes de Luisa María Alcalde, líder nacional de Morena. él dijo que supuestamente buscaban perjudicar al país. asimismo, señaló que los actos violentos y los daños a la propiedad privada los causaron grupos vinculados a la bancada guinda.
El legislador determinó que, al atacar a visitantes locales y extranjeros en la Ciudad de México, se estaría proporcionando a Donald Trump un nuevo argumento para justificar redadas violentas dirigidas contra mexicanos en Estados Unidos. “como sino fuera poco el nivel de tensión en el conflicto México-Estados Unidos, lo hacen en 4 de julio para enrarecer aún más la relación que tenemos”, apuntó. “estados unidos es nuestro principal socio comercial y en momentos claves de la relación con México, este tipo de acciones no generan nada de sintonía para una buena relación”, añadió.
A la declaración se sumó la postura de Ernesto Sánchez Rodríguez, diputado federal del PAN. él señaló que los episodios de violencia impulsados por simpatizantes de Morena y la falta de acción por parte del gobierno capitalino pudieron contribuir a que Estados Unidos adoptara una actitud más hostil hacia México. “el secretario de gobierno local, César Cravioto, fue una maceta de ornato que nunca intervino y ese pequeño detalle, solo será un agravio más para el cual, le pasarán factura nuestros paisanos en Estados Unidos”, señaló Sánchez Rodríguez.
De igual forma, Sánchez Rodríguez afirmó que este tipo de acciones dificultan el fortalecimiento de los vínculos entre ambos países y envían un mensaje negativo ante la llegada del nuevo embajador de Estados Unidos en México, Ronald Johnson. a modo de conclusión, la bancada del PAN sostuvo que la gentrificación en la Ciudad de México requiere soluciones técnicas que respalden experiencias internacionales implementadas en otras grandes ciudades. además, expresó su rechazo hacia toda forma de violencia, en particular la incitación contra ciudadanos estadounidenses que se registró el pasado 4 de julio. “esto nunca será el camino y desde luego que, esa no debe ser la voz del pueblo mexicano, donde hoy Estados Unidos, Canadá y México, debemos ser un mismo bloque”, enfatizó.
