Ciudad Juárez, Chih.— Adrián LeBarón informó que, tras una audiencia que se prolongó hasta altas horas de la noche del martes, un juez vinculó a proceso a Jacinto “N”, alias El Monster, por el delito de feminicidio, y determinó que también se investigue su presunta responsabilidad en actos de terrorismo.
Para LeBarón, este avance judicial no solo representa un paso hacia la justicia en el caso de la masacre que cobró la vida de integrantes de su familia, sino que deja al descubierto una realidad alarmante en el país: “El mejor escondite de los criminales es a plena luz del día y en los cuarteles de policía. Una vez ahí, son los que mandan, los que asesinan con placa, nombramiento y armas oficiales”, expresó.
Según denunció, Jacinto “N” se desempeñaba como agente de la Policía Municipal de Ciudad Juárez desde hacía un año y contaba con formación militar en el Ejército. “Las personas que deberían cuidarnos son quienes siembran el terror y son capaces de asesinar niñas y mujeres en caminos olvidados de México. Es doloroso y brutal darse cuenta de esto”, lamentó.
LeBarón cuestionó cuántos casos similares existen en las corporaciones de seguridad: “¿Cuántos habrán así en nuestro país? ¿Cuántas policías están secuestradas o tienen permiso para sembrar miedo y muerte? Este no es un caso aislado, es un problema estructural”.
El activista subrayó que la decisión judicial abre un precedente importante para el país, al reconocer la gravedad de los delitos y la necesidad de investigar a fondo la infiltración criminal en las instituciones. “Nos llena de aliento saber que se vinculó por feminicidio y que se investigará por terrorismo. Nos estamos quitando las vendas de los ojos, tocamos las heridas, pero para que comiencen a sanar”, afirmó.
Adrián LeBarón reiteró que seguirá exigiendo justicia y visibilizando la complicidad y corrupción que permiten que elementos de seguridad participen en crímenes atroces. “Este es un mensaje claro: no vamos a callar y no vamos a dejar que los uniformes sean un escudo para asesinos”, concluyó.
