H. Cd. de Chihuahua.- Una tarde en la playa terminó en tragedia para Lucy Reed, una adolescente de 15 años que murió tras nadar con el estómago lleno y ahogarse al aspirar su propio vómito. El hecho ocurrió en Cleethorpes, Inglaterra, donde disfrutaba del día con su madre. Pese a que le pidieron esperar a hacer la digestión, Lucy se metió al mar tras comer pizza y papas fritas.
El reporte forense reveló que la joven estuvo alrededor de 30 minutos en el agua antes de intentar regresar. Fue en ese momento cuando vomitó, aspiró el contenido gástrico y perdió el conocimiento. Aunque se montó un amplio operativo de búsqueda, incluyendo helicópteros y botes de rescate, fue demasiado tarde. La joven fue hallada sin signos vitales y su muerte se confirmó en el hospital.
El caso ha conmocionado a la comunidad británica, no solo por la tristeza de la pérdida, sino también por el inusual motivo: una combinación de digestión incompleta, angustia en el agua y la fuerza de la marea. El forense concluyó que fue una tragedia accidental, una desgracia causada por circunstancias desafortunadas que pudieron haberse evitado.