H. Cd. de Chihuahua.- Carlos Alberto Treviño Medina, quien fue el último director general de Petróleos Mexicanos (Pemex) durante el sexenio de Enrique Peña Nieto, enfrenta acusaciones por los delitos de lavado de dinero y asociación delictuosa, relacionados con el caso de la planta petroquímica Etileno XXI, uno de los escándalos más emblemáticos vinculados a la constructora brasileña Odebrecht.
La Fiscalía General de la República (FGR) obtuvo en noviembre de 2021 una orden de aprehensión en su contra, luego de que Treviño no se presentara a una audiencia de imputación programada en el Centro de Justicia Penal Federal de Almoloya de Juárez, en el Estado de México. El exfuncionario argumentó falta de garantías de seguridad jurídica para su comparecencia.
El exdirector de Pemex fue señalado por Emilio Lozoya Austin, también exdirector de la paraestatal, de haber recibido presuntos sobornos por 4 millones 390 mil pesos, a cambio de facilitar la adjudicación de un contrato a Braskem, filial de Odebrecht, para el desarrollo de la planta Etileno XXI. El proyecto fue impulsado durante el sexenio de Felipe Calderón con el objetivo de reactivar la industria petroquímica nacional.
Desde finales de 2021, Treviño Medina ha sido buscado por la Interpol en más de 190 países, aunque diversas fuentes oficiales han confirmado que se encuentra residiendo en Texas, Estados Unidos.
El caso Etileno XXI forma parte de una serie de investigaciones más amplias sobre corrupción y sobornos en Pemex, que han salpicado a exfuncionarios de alto nivel de administraciones pasadas. Hasta el momento, Treviño Medina no ha comparecido ante las autoridades mexicanas ni ha emitido una declaración pública sobre las acusaciones en su contra.
