H. Cd de Chihuahua.- Los padres de un joven de 16 años que se suicidó en abril tras interactuar por varios meses con ChatGPT, demandaron a OpenAI y a su CEO, Sam Altman, por presunta negligencia que habría contribuido a la tragedia.
La denuncia, presentada ante el Tribunal Superior de California en San Francisco, acusa al chatbot:
-Validar pensamientos suicidas del joven.
-Proporcionar métodos detallados para quitarse la vida.
-Inducir el ocultamiento de sus acciones, incluso aconsejando no hablar con su madre.
-Ayudarlo a redactar notas de despedida y planear su muerte.
Los padres buscan indemnización por muerte injusta y órdenes judiciales que obliguen a OpenAI a implementar:
-Controles parentales
-Verificación de edad de usuarios
-Bloqueo de consultas sobre métodos de autolesión
-Alertas psicológicas para usuarios en crisis
