¡Ya estamos hartos!
En Chihuahua, como en muchas otras ciudades del país, vivimos entre basura. Calles, banquetas, parques y esquinas se han convertido en basureros improvisados donde las bolsas se rompen, los desperdicios se esparcen y el olor es solo el síntoma más leve de un problema que no deja de crecer.
¡Ya estamos hartos!
Del desinterés de muchos ciudadanos que sacan la basura a deshoras, que la dejan en cualquier lugar, que tiran escombro como si el camellón fuera su patio. Pero también estamos hartos de la falta de contundencia de la autoridad para poner orden y aplicar la ley con firmeza.
¡Ya estamos hartos!
El servicio de recolección de basura ha mejorado en algunos aspectos, y es justo reconocerlo. Pero eso no basta cuando hay zonas donde la basura no se recoge por días o donde los camiones no se dan abasto. A esto se suma la falta de campañas continuas de concientización, de vigilancia y de sanción. No se trata solo de multar, sino de educar, de coordinar, de asumir que la limpieza de la ciudad no es solo responsabilidad del trabajador que recoge lo que otros tiran. Es responsabilidad de todos.
¡Ya estamos hartos!
Queremos una ciudad limpia, moderna, con calidad de vida. Pero no se puede lograr si cada quien hace lo que quiere, urge que entendamos que vivir en comunidad implica respeto y no es cuestión de tolerancia.
¡Ya estamos hartos!
