H. Cd de Chihuahua.- La secretaria de Seguridad Nacional de EUA, Kristi Noem, confirmó el domingo que el gobierno federal ampliará sus operaciones migratorias en Chicago, intensificando la presencia de agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) en una ciudad considerada bastión demócrata y santuario para migrantes.
Durante una entrevista, Noem declaró que el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) ya tiene actividades activas en la ciudad, pero que planean “agregar más recursos” en las próximas semanas. Esto se da en el contexto de una ofensiva más amplia del presidente Donald Trump contra las jurisdicciones que considera “blandas con la migración y el crimen”.
La decisión ha provocado una respuesta inmediata del gobernador de Illinois, JB Pritzker, y del alcalde de Chicago, Brandon Johnson, quienes se han mostrado firmemente en contra del despliegue federal. Ambos sostienen que la criminalidad ha disminuido en la ciudad y aseguran que presentarán demandas legales si la administración Trump avanza con la intervención.
Johnson también firmó una orden ejecutiva que prohíbe a la policía local colaborar con autoridades federales en la aplicación de leyes migratorias civiles, incluidas patrullas y retenes.
“Este es un ataque directo a nuestras comunidades migrantes. No cooperaremos con un gobierno que quiere politizar la migración y criminalizar a personas que buscan una vida mejor”, declaró Johnson.
El presidente Trump ha intensificado su retórica en contra de Chicago, advirtiendo a través de redes sociales que si el estado no “resuelve sus problemas de criminalidad, el gobierno federal intervendrá”.
