
La Selección Mexicana empató 0-0 ante Japón en un partido amistoso disputado en el Oakland Coliseum, a nueve meses del arranque del Mundial. Aunque México figura cuatro posiciones arriba de Japón en el ranking FIFA, fueron los asiáticos quienes dominaron gran parte del encuentro, evidenciando las carencias del equipo dirigido por Javier Aguirre, quien había solicitado este tipo de duelos exigentes para medir el verdadero nivel del Tricolor fuera de la zona Concacaf.
El equipo mexicano se mostró impreciso en la salida y cayó en un juego repetitivo, en el que el balón regresaba constantemente al portero Luis Ángel Malagón, quien incluso salvó al equipo con una atajada clave ante un disparo de Takefusa Kubo tras un error de Marcel Ruiz. Japón generó mayor peligro con remates desviados de Kubo y Ritsu Doan, mientras que la mejor oportunidad mexicana llegó al minuto 68 con un cabezazo de Erik Lira, bien contenido por el arquero Zion Suzuki.
El partido también dejó momentos destacados y preocupantes: el regreso de Hirving “Chucky” Lozano al minuto 60, tras un año y medio de ausencia con la selección, fue uno de los aspectos positivos; en contraste, la salida por lesión de Edson Álvarez al 30’, por molestias musculares, encendió las alarmas en el cuerpo técnico. En la recta final del partido, César Montes fue expulsado tras revisión en el VAR por una falta sobre Ayase Ueda, cortando una jugada manifiesta de gol. El empate deja más dudas que certezas para el equipo mexicano en su camino hacia la Copa del Mundo.


