H. Cd de Chihuahua.- Los países miembros de la OTAN están divididos sobre cómo responder a las constantes violaciones del espacio aéreo por parte de aviones y drones rusos, lo que ha intensificado las tensiones internas en la alianza y generado dudas sobre la postura común frente a Rusia.
Durante una reunión de emergencia del Consejo del Atlántico Norte, convocada por Estonia tras una incursión aérea rusa en su territorio, surgieron posturas enfrentadas. Países como Estados Unidos, Polonia y las naciones bálticas propusieron establecer como política el uso de la fuerza contra futuras violaciones.
Por otro lado, países como Alemania y algunas naciones del sur de Europa pidieron moderación, temiendo que una respuesta militar pueda escalar el conflicto.
En las últimas dos semanas:
21 drones rusos ingresaron a Polonia, algunos fueron derribados por la OTAN.
Drones sobrevolaron Rumania y Estonia con transpondedores apagados.
Un avión ruso pasó sobre una fragata alemana en el Mar Báltico.
Noruega reportó tres violaciones este año, una sobre territorio continental.
Aunque algunos incidentes podrían ser errores o efectos de interferencia electrónica, miembros de la OTAN del flanco oriental exigen una respuesta firme, argumentando que la intención rusa es secundaria frente al riesgo creciente.
