H. Cd. de Chihuahua.- Lo que debía ser un viernes tranquilo en el exclusivo fraccionamiento Residencial Leones terminó convertido en una batalla vecinal con gritos, golpes y bloqueos, luego de que los habitantes se enfrentaran con los guardias de seguridad privada por el control de la administración y el cobro de cuotas de hasta 6 mil pesos anuales, presuntamente sin rendición de cuentas.
De acuerdo con los reportes, la confrontación inició la mañana del 24 de octubre cuando un grupo de vecinos exigió ingresar a las oficinas administrativas para revisar los estados financieros del complejo. Sin embargo, los guardias reaccionaron de forma violenta e incluso, según testigos, portaban armas de fuego. En el disturbio, un habitante resultó golpeado, aunque no hubo detenidos.
Los residentes acusan que la actual administración opera “como un negocio privado y no como una comunidad”, y aseguran que los vigilantes intentaron borrar evidencias y bloquear los accesos para impedir el ingreso de los colonos inconformes.
Ante el caos, elementos de la Guardia Nacional y autoridades locales acudieron al fraccionamiento para restablecer el orden y liberar la vialidad de la carretera Chihuahua–Aldama, que había sido cerrada como medida de presión. Policías municipales tomaron declaraciones y comenzaron a recabar testimonios y videos del altercado.
El ambiente en el fraccionamiento continúa tenso. Los vecinos exigen asumir directamente la administración y piden una auditoría a fondo sobre el manejo del dinero.
“Queremos transparencia, no amenazas; esto no es un coto de poder, es donde vivimos”, expresaron algunos de los colonos, quienes advirtieron que no retirarán sus protestas hasta obtener una respuesta clara de las autoridades.



