H. Cd. de Chihuahua.- Tras los recientes enfrentamientos armados en Guachochi que cobraron la vida de un profesor y varios pobladores, el vicario de la diócesis de la Tarahumara, Héctor Martínez, pidió reforzar la seguridad en toda la zona serrana.
“El abandono es peligroso; se necesita presencia y reconstruir el tejido social”, declaró el religioso, quien reconoció la atención en salud hacia los pueblos originarios, pero urgió mayor coordinación ante la violencia.
La Iglesia, dijo, no solo protesta: también propone soluciones comunitarias.



