
H. Cd. de Chihuahua.- “¡Disparen, culeros, disparen!”, grita uno de los policías estatales segundos antes de que una ráfaga de plomo reviente el silencio de la sierra. Así comienza el video del ataque en Moris, que muestra sin filtros la emboscada donde tres agentes fueron asesinados y cuatro más resultaron heridos a manos de un comando armado.
Las imágenes estremecen: los oficiales, atrapados en medio del monte, intentan responder mientras las balas atraviesan la patrulla. Uno de ellos, herido, alcanza a decir con voz quebrada “¡No puedo disparar!”, y otro le grita “¡Sí puedes, sí puedes!”, intentando mantenerlo con vida en medio del fuego cruzado.
El video, grabado por los propios elementos, muestra la crudeza del enfrentamiento y la desesperación de quienes, con valor y miedo al mismo tiempo, pelean por sobrevivir. El ataque ocurrió en una brecha cercana a la cabecera municipal de Moris, una zona donde la delincuencia organizada domina los caminos y los cerros.
Los agentes caídos fueron identificados como Germán Peralta Hernández, Guillermo Aguirre Palma y Ana Esmeralda Arteaga Arroyo. Desde entonces, la SSPE, en coordinación con el Ejército y la Guardia Nacional, mantiene un operativo permanente en la región serrana.
El material difundido en redes sociales expone la otra cara del uniforme: la del miedo, la adrenalina y la guerra que se libra todos los días lejos de los reflectores, donde cada disparo puede ser el último.


