Un video captado por un cliente en una sucursal de Dunkin’ Donuts en Crofton, Maryland, ha desatado una ola de indignación global tras mostrar a un empleado cortándose las uñas de los pies sobre una mesa de preparación de alimentos. Las imágenes, que se volvieron virales este sábado 27 de diciembre, exponen al trabajador sentado cómodamente en la superficie de acero inoxidable destinada a la elaboración de donas y café, realizando su aseo personal sin importar la presencia de consumidores o las normas básicas de salubridad.
Este incidente ha provocado que miles de usuarios en plataformas como TikTok y X exijan el cierre inmediato del establecimiento y una revisión exhaustiva de los protocolos de higiene de la franquicia, cuestionando la supervisión interna que permitió tal comportamiento en pleno horario laboral.
La crisis de imagen para la marca ha escalado rápidamente, acumulando millones de reproducciones y afectando la confianza de los clientes en la seguridad alimentaria de la cadena a nivel internacional. Ante la presión mediática, autoridades de salud locales en Maryland han iniciado una investigación de oficio para determinar las sanciones correspondientes, mientras que la empresa matriz de Dunkin’ emitió un comunicado preliminar asegurando que el comportamiento del individuo no representa los valores de la compañía y que se han tomado medidas disciplinarias severas, incluyendo el despido inmediato del involucrado.
Este caso se suma a una lista de negligencias captadas por ciudadanos que subrayan la vulnerabilidad de los estándares de limpieza en la industria de comida rápida y la necesidad de una vigilancia más estricta por parte de los entes reguladores en 2026.


