Chihuahua, Chih.- Ismael Ureña Pérez, un talentoso prospecto de béisbol de solo 14 años, falleció el pasado 14 de noviembre en República Dominicana. El joven entrenaba junto a sus hermanos en la Yordy Cabrera Baseball Academy cuando le inyectaron un esteroide veterinario conocido como “Bodedone”, utilizado comúnmente para mejorar el rendimiento de caballos, según análisis médicos.
Los hermanos de Ismael también reportaron graves secuelas tras el uso de esta sustancia, como taquicardia y problemas de visión.
El Comisionado Nacional de Béisbol, Junior Noboa, y la Dirección Nacional de Niños, Niñas, Adolescentes y Familia (Dinnaf), encabezada por Olga Diná Llaverías, anunciaron una investigación para esclarecer los hechos y sancionar a los responsables.
Por su parte, la familia de Ismael ha denunciado recibir amenazas de muerte tras exponer lo ocurrido en la academia. Joel Ureña, hermano mayor del joven, declaró:
“Le avisamos a quienes nos amenazan que solo queremos justicia. No nos puede pasar nada más.
El uso de esteroides como el “caballín” ha sido motivo de suspensiones en las Grandes Ligas (MLB) y su uso en jóvenes plantea serias preocupaciones sobre la ética y la salud en el ámbito deportivo. Este caso pone en evidencia la necesidad de regulaciones más estrictas y protección para los atletas en formación.