Este miércoles se cumplió un mes del asesinato del padre Marcelo Pérez Pérez en Chiapas y en redes sociales cobró relevancia en las últimas horas el audio de una de las amenazas que enfrentó el religioso por presuntos integrantes del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
En la llamada de casi nueve minutos de duración, una voz de hombre con aparente acento extranjero no sólo amenazó la integridad física del sacerdote de origen indígena, también le advirtió de peligros para su familia, fieles, seguidores y el pueblo en general en Chiapas si es que “no mostraba un buen gesto de su parte” hacia la organización criminal para dejarlos trabajar durante seis años en el estado.
El supuesto líder de plaza le exigió al sacerdote -quien apenas habla- mantener la boca cerrada, declararse amigo de los delincuentes y aceptar la “seguridad” a su persona si es que prefería evitar un baño de sangre al interior de “su hermosa y linda parroquia”.
La amenazante llamada al defensor de los derechos humanos ocurrió varios años antes de su ejecución y aunque se sabía de su existencia, es hasta hoy que se conoció por completo su contenido.
Grupo Imagen Multimedia reproduce a continuación los extractos más reveladores del mensaje intimidante que recibió el padre Marcelo Pérez Pérez en su parroquia de San Cristóbal de las Casas, Chiapas.
Presunto jefe criminal: Yo quiero hacerle saber, padre que el punto más importante, el cual se tocó, venimos firmando pactos, pactos para parar y disminuir el índice de violencia el cual ha venido y perjudicando y abatiendo a toda la gente del clero y de igual manera a la gente del gobierno, como se ha visto por las noticias.
Yo quiero hacerle saber padre que yo, en estos momentos no vengo de ninguna representación gubernamental, yo quiero hacerle saber en estos momentos padre, que yo vengo representando al Cártel de Jalisco Nueva Generación, los cuales venimos retomando esta plaza, en Chiapas, claramente a la orden del señor Nemesio Oceguera Cervantes, señor Mencho.
Padre, me imagino que sí ha escuchado usted hablar de mi organización presente y operando en todo el estado y sabe muy bien con qué tipo de personas trata, dialoga en estos momentos. ¿Es correcto, padre?
Padre Marcelo: Mmmm.
Presunto jefe criminal: Quiero hacerle saber padre, que este llamado no es ni para que se me alarme ni mucho menos para que se me espante, yo quiero hacerle saber que el motivo de este llamado claramente es porque lo único que quiero es que usted se alinié con mi organización como lo viene haciendo aquí el (inaudible).
¿A cambio de qué? Pues a cambio de que se le brinde protección y seguridad durante estos 6 años, los cuales voy a durar en toda esta plaza en todo Chiapas y créame que a usted en lo personal y a todo al que porte su sangre y su apellido, que lo es su hermosa y linda familia, usted me ha atacado padre, con el sudor de su frente hasta el día de hoy y de igual manera sus fieles, seguidores, los cuales usted reúne hasta el momento. ¿Quedó claro, padre?
Ahora, yo quiero hacerle saber que si yo me dirigí hacia usted por esta vía es porque no creo que sería grato a su persona que yo tuviera que interrumpir en alguna celebración suya de misa o cualquier festejo tradicional aquí en la parroquia y tuviera que desatar una masacre a mansalva dentro de ella, claramente dejándole la cabeza de sus fieles seguidores en el lugar de su hermosa y linda parroquia, no creo que sea necesario ni creo que sería algo grato a su persona. ¿O sí, padre?
Padre Marcelo: Le escucho.
Presunto jefe criminal: ¿No cree que sería algo grato a su persona o sí padre?
Padre Marcelo: ¿Qué más quiere decir?
Presunto jefe criminal: Aquí nada más le pregunto una cosa, padre: ¿le interesa la vida, la paz y la tranquilidad de sus fieles, seguidores, sus feligreses o no le interesa?
Padre Marcelo: Buscamos siempre la paz del pueblo.
Presunto jefe criminal: Ahora yo le digo muy bien, quiero hacerle saber que de este llamado el cual usted y yo mantenemos, de este llamado depende la vida, la paz y la tranquilidad de cada uno de los suyos.
Quiero que le quede muy claro, créame padre, en estos momentos si quiere darse cuenta usted podrá mandar a alguien a que se fije afuera de la parroquia, hay dos camionetas negras, tipo Suburban con 8 de mis mejores sicarios esperando que yo y usted terminemos de dialogar.
No es agradable porque como yo le voy a decir se lo juro por el mismo Dios que usted cree y que yo creo y el cual tiene colgado detrás de usted en esa cruz, que si usted hace las cosas bien, yo no tengo por qué truncar el bonito porvenir ni de usted ni de nadie de los suyos, pero aquí de antemano si usted piensa que este llamado e sun juego o una broma, se lo juro por el mismo Dios, que usted va a ser la noticia el día de mañana, ¿quedó claro, padre?
Padre Marcelo: ¿Algo más qué decir?
El amago al padre Marcelo y a su labor prosiguió por varios minutos más hasta que el hoy occiso decidió cortar la comunicación del presunto jefe de plaza quien le exigió declararse amigo o enemigo de la organización criminal.
Los veo a todos como hermanos. Yo no estoy diciendo ni si ni yo, yo estoy en paz con Dios, busco la paz para el pueblo. Que pase un feliz día. Dios lo bendiga”, fue la última frase del sacerdote de origen tsotsil quien dedicó los 22 años de su vida pastoral en Chiapas, hasta que el 20 de octubre de este año un hombre lo asesinó al salir de celebrar la misa dominical en San Cristóbal de las Casas.
