Chihuahua, Chih.- Los cárteles mexicanos han comenzado a contratar a exmilitares y exguerrilleros colombianos, muchos provenientes de las extintas fuerzas armadas colombianas, para fortalecer su capacidad bélica.
Estas organizaciones criminales utilizan a estos expertos en la fabricación de explosivos caseros y en el manejo de drones armados, tácticas que se han vuelto comunes en sus enfrentamientos por el control territorial y del tráfico de drogas sintéticas.
La Tierra Caliente de Michoacán se ha identificado como un punto clave para estas actividades, donde se ubican campos de entrenamiento dirigidos por colombianos.
Además, algunos de estos excombatientes son traĂdos con engaños y, tras cumplir su funciĂłn, son abandonados o desaparecidos por los propios cárteles.