Chihuahua, Chih. – Carlos Humberto P.R. al parecer decidió que entregarse era la única forma de escapar de la vergüenza, tras el choque fatal que dejó sin vida a Edna y Julián en Delicias.
Según se reporta, no fue por remordimientos ni porque la culpa lo consumiera, sino porque, claramente, no podía esconderse mucho más.
El choque, que fue tan fuerte como un mal chiste, acabó con la vida de las dos víctimas de manera trágica.
Al final, Carlos Humberto pensó que entregarse a las autoridades sería su última jugada para evitar que lo persiguieran. Lo que no sabe es que la justicia no devuelve vidas, solo reparaciones tardías.
La Fiscalía ya tiene el encargo de revisar si su entrega fue una forma de acallar su conciencia o simplemente una salida por el ruido mediático.
Carlos podría enfrentar una larga espera mientras Edna y Julián se quedan atrás con un accidente que jamás olvidarán, ni ellos ni sus familias.