H. Cd. de Chihuahua.- La tarde del jueves 10 de abril, la jueza Karen Reyes, del penal de Barrientos en el Estado de México, determinó vincular a proceso a Carlota “N” y a sus hijos, Mariana “N” y Eduardo “N”, por los delitos de homicidio calificado y homicidio en grado de tentativa.
La decisión se da tras los hechos ocurridos el pasado 1 de abril, cuando Carlota “N”, de 73 años, acudió a un domicilio en Chalco presuntamente invadido, donde disparó contra dos hombres —padre e hijo—, provocándoles la muerte. El caso ha causado gran controversia y movilización social.
Durante la audiencia, que se extendió por siete horas, la defensa argumentó que la detención fue arbitraria y que se violaron derechos humanos. Sin embargo, la jueza desestimó estos argumentos y afirmó que “en México no se puede tomar justicia por propia mano”, independientemente de los delitos que se hayan cometido previamente.
Pese a la edad de la imputada y su diagnóstico de diabetes, se le negó el beneficio de prisión domiciliaria. La jueza resolvió que tanto Carlota “N” como sus hijos deberán continuar su proceso en prisión preventiva dentro del penal de Chalco, donde recibirán atención médica si es necesario.
El equipo legal de Mariana “N” alegó que ella no disparó, pero la jueza consideró que eso no la exime de su presunta participación en los hechos.
La investigación complementaria tendrá un plazo de un mes.
Fuera del juzgado, vecinos y simpatizantes de Carlota “N” se manifestaron por segundo día consecutivo para exigir su libertad, asegurando que lo único que hizo fue defenderse de un intento de despojo.
“Ahora cualquiera puede invadir tu casa y no puedes defenderte”, expresó Martha Esther, una de las manifestantes. “Lo correcto es que los verdaderos delincuentes estén en prisión, no ella”, añadió Mónica Flores, otra de las presentes.
El caso ha generado un debate nacional sobre los límites de la defensa propia y la aplicación de la ley en casos de despojo e invasión de propiedades.