Después de tres años de intensas discusiones, los países miembros de la Organización Mundial de la Salud (OMS) alcanzaron un acuerdo histórico para fortalecer la preparación global ante futuras pandemias. El documento será debatido y potencialmente ratificado en la próxima Asamblea Mundial de la Salud en mayo.
El anuncio fue hecho este miércoles por la OMS a través de un comunicado, en el que se calificó el consenso como un “gran paso” para construir un mundo más seguro. El director general del organismo, Tedros Adhanom Ghebreyesus, celebró el avance: “Las naciones del mundo han hecho historia hoy en Ginebra. Han demostrado que el multilateralismo está vivo y que todavía se puede encontrar una respuesta compartida ante amenazas comunes”.
La elaboración del acuerdo se aceleró en medio de crecientes amenazas sanitarias globales como el resurgimiento del ébola, el sarampión y la gripe aviar, y cinco años después del impacto del covid-19. Uno de los principales puntos de conflicto durante las negociaciones fue el artículo 11, relativo a la transferencia de tecnología médica para los países en desarrollo, el cual finalmente quedó aprobado bajo el principio de acuerdo “voluntario y de mutuo consentimiento”.
El texto final, de 32 páginas, fue adoptado por unanimidad por los países participantes. Anne-Claire Amprou, copresidenta de las negociaciones, confirmó su aprobación ante un pleno que respondió con aplausos.
Estados Unidos no participó en la fase final del proceso, luego de que el presidente Donald Trump ordenara el retiro del país de la OMS tras su regreso al poder en enero.
